Estimada Internauta,Esta es una carta en referencia al uso del Cytotec para fines abortivos. Tomando en cuenta la necesidad de esclarecer el uso del mismo para varias personas, creo que tengo muchas cosas importantes para decirle al respecto. Antes de tomar el Cytotec, es bueno que sepa que no es posible usar este remedio en casa para fines abortivos, por lo menos no como una técnica correcta, y sin consecuencias graves. A mí me gustaría que leyese con atención esta aclaración, fruto de una experiencia razonable en este tema; para que pueda entender de lo que se trata, y si esta es la mejor elección que alguna persona, y su compañero, puede tomar. Trato con seguridad las cosas que a continuación escribo, porque conozco muchas personas que se envolvieron desafortunadamente con él y muchas que dejaron de hacerlo también; algunas inclusive perdieron la vida por causa de él. Espero que este mensaje pueda ayudarle si todavía hay tiempo. El Cytotec fue desarrollado con otro nombre hace casi 20 años, no para problemas estomacales ni para provocar abortos, sino para producir contracciones en el útero cuando era necesario adelantar el parto, o expulsar un feto ya muerto dentro del útero de una embarazada. Después de 10 años, la droga aún no ha pasado su etapa experimental; pero con la descubierta de sus cualidades, en su principio activo, en el tratamiento de úlceras; dejó de ser investigado principalmente para producir contracciones en el útero, para adelantar el parto, y pasó a ser comercializado para tratar úlceras. Poco a poco, algunas personas tuvieron conocimiento de su efecto abortivo, inclusive porque el fabricante escribió en las advertencias que, era contraindicado para mujeres embarazadas porque, podría producir un aborto. El remedio pasó poco a poco a ser comprado, sin orientación médica, no sólo para el tratamiento de úlceras, sino para provocar un aborto aunque el laboratorio no recomendara su uso en embarazadas. Por causa de su historial, el remedio fue estudiado y probado para úlceras y no para abortos. No se hizo, por parte de los fabricantes, un estudio que mostrara técnicamente su efecto abortivo. Todo lo que se conoce de él, y sobre este punto, es el resultado de una clínica muy informal, irregular y sin soporte técnico. Es muy diferente de un medicamento que ha sido analizado por una multitud de profesores y científicos constantemente: estudiándolo, debatiéndolo y perfeccionando su conocimiento sobre la forma como actúa. El Cytotec funciona solamente, lo que todo parece indicar, provocando contracciones para entrar en trabajo de parto y la consecuente expulsión del feto, en cualquier etapa de la gestación. El no actúa, por lo tanto, sobre el propio feto, apenas provoca su expulsión. El feto no muere por ser agredido, pero si tiene menos de seis meses al ser expulsado muere asfixiado. Aunque el feto tiene sus pulmones formados a partir del primer mes de gestación, antes de los seis meses fuera del útero puede inhalar aire, pero el oxigeno no consigue pasar de los alvéolos a la sangre. El feto muere al aire libre por asfixia, exactamente como le ocurriría a una persona que fuera asfixiada. Es importante, entender lo que pasa en la embarazada cuando toma el remedio, que tenga en mente que el remedio nunca fue desarrollado y probado para provocar el aborto, ni en Brasil ni en cualquier país del primer mundo. Esta es la razón por la cual comprendemos se den resultados tan diversos e irregulares en varias embarazadas quienes lo han tomado. En el caso típico, algunas horas después de ser ingerido, la mujer entra en trabajo de parto y expulsa el feto, pero después de eso las contracciones se vuelven difícil de controlar. Los dolores abdominales son intensos, mucho más fuertes que cuando sucede un aborto natural; y la mujer puede sangrar tanto y con tal cantidad, que está casi siempre obligada a ir luego a un hospital. En algunas mujeres su ingestión no provoca ningún efecto, ni siquiera la expulsión del feto, en otras sólo provoca la expulsión del feto. En la mayoría de los casos, sin embargo, la expulsión del feto es seguida de hemorragias que aumentan violentamente con el paso del tiempo. No hay asesoría médica para las personas que quieren tomar el Cytotec, y tampoco hay soporte técnico para los médicos -aunque el médico necesite tal asistencia- por parte del fabricante y de quienes lo desarrollan. Lo que existe es la ayuda que prestan los hospitales cuando auxilian a sus pacientes. A pesar de ello, el aborto fue provocado y fue consumado y la hemorragia se vuelve incontrolable; esto si los hospitales ayudan por causa de la hemorragia y no por causa del aborto. Las muertes causadas por hemorragia debido al uso del remedio no son muy comunes, principalmente porque en los casos típicos, la hemorragia asusta tanto a la mujer que invariablemente acaba yendo un hospital. Pero en el caso que no lo procurase, ciertamente el cuadro hemorrágico creciente le provocaría un ataque cardíaco. A veces, esto sucede, lo que es descrito principalmente por los médicos legistas del IMLs (Instituto Médico Legal). En algunos casos la hipersensibilidad de la mujer al remedio puede ser tal, que el remedio provoque una ruptura repentina del útero; luego de ser ingerido o hasta más tarde. Esto puede ser fatal sino se tiene la posibilidad de una asistencia médica y hospitalaria de inmediato. La ruptura del útero puede suceder más fácilmente en mujeres que tienen un historial de cesárea o embarazos más avanzados. Si nada de esto ocurre y la hemorragia se consigue controlar en casa; y esto no provoca la muerte de la embarazada, algo raro de suceder, puede por lo tanto estar sucediendo otra situación de alto riesgo. Restos del feto o de la placenta pueden haber sido retenidos dentro del útero durante todo este tiempo y haber provocado una infección local. A veces, el remedio produce que se desprenda la placenta, con la consecuente muerte del bebé, sin que el bebé sea expulsado. La embarazada piensa que no sucedió nada, no procura un médico, pero en realidad está reteniendo el aborto. Tanto el aborto retenido como los restos fetales y de la placenta, pueden hacer que pus se acumule en el útero, tratando en vano de destruir los restos del feto y de la placenta, que deberían haber sido removidos por medio del curetaje dentro de un hospital días antes. Los dolores y las hemorragias pueden cubrir otros síntomas que harían sospechar, a una embarazada primeriza, que algo más pudiera estar sucediendo. En la medida que el pus se acumula, este va invadiendo el torrente sanguíneo de la embarazada y puede esparcirse por todo su cuerpo. Esto se conoce con el nombre de septicemia. Cuando se llega a este cuadro, la única conducta correcta es la remoción de los restos del feto y de la placenta, e internar inmediatamente a la paciente en una unidad de terapia intensiva. Hay un cierto número de muertes por septicemia, aunque hayan sido internadas en la UTI, causadas por el uso del Cytotec. Muchas de las muertes producidas por el aborto en general, y algunos causados por el uso del Cytotec se deben a la septicemia. Si no sucede la septicemia pero hay retención de restos del feto o de la placenta, por un tiempo, estos tejidos se vuelven necrosis y son difíciles de remover por medio del curetaje; frecuentemente junto con la remoción de los tejidos con el curetaje es inevitable tener que remover una parte de los tejidos del endometrio, que es la parte más interna del útero. Las paredes internas del útero constituyen el endometrio, por este motivo acaban adheriéndose unas a otras causando esterilidad en la mujer. La mayoría de las muertes causadas por el uso de Cytotec no son por hemorragias o por septicemia. La mayoría de las muertes ocurren semanas o meses después y no se debe propiamente al uso del Cytotec, pero si al uso casero del Cytotec que, independientemente de lo que se piense del aborto en sí, jamás debería ser utilizado sin supervisión médica. Hay algunos casos donde se usa el Cytotec para expulsar un feto muerto en los hospitales. La manera y los cuidados en que el mismo debe ser suministrado son muy diferentes al modo como podría ser usado en casa. Sería una falta de responsabilidad médica, simplemente inimaginable, recetarlo; aunque las personas digan que es totalmente inofensivo si se trata de expulsar un feto vivo, esto significa provocar un aborto. El uso doméstico del Cytotec es muy traumático, pero en la mayoría de los casos no causa una muerte inmediata que esté directamente relacionada al mal uso del medicamento. La mayoría de las muertes suceden por los efectos que le siguen mucho tiempo después, como cuando una persona es atropellada y tiene fractura de huesos, meses después de haberse dado de alta, acaba muriendo de complicaciones causadas indirectamente, pero que están realmente relacionadas con las fracturas anteriores. Este tipo de accidente es más común con el Cytotec de lo que se acostumbra a divulgar, y es bien conocido por los médicos legistas. Debido a todos estos problemas, después de haberse fabricado hace algunos años y vendido sin restricción alguna, -oficialmente para úlceras, de hecho en gran parte para provocar aborto sin ninguna posibilidad de orientación médica, y sin ninguna orientación inclusive para los mismos médicos-, los abusos se volvieron tan grandes que el Ministerio de Salud en Brasil prohibió su manufactura y distribución por parte del fabricante oficial. Esto hizo que el acceso al remedio disminuyera bastante. Por otro lado como ya se había creado un buen mercado para el remedio en la gran cantidad de público mal informado, esto también incentivó el aparecimiento de fabricantes clandestinos haciendo que la droga provenga de los más diversos orígenes. Muchos de los comprimidos llamados ahora de Cytotec no son en realidad verdaderos Cytotecs, porque tienen origen de fabricantes clandestinos en países pobres de América Latina (como Paraguay) y no se sabe a ciencia cierta si la fabricación es de allí mismo o sólo es un intermediario, ni siquiera si el fabricante es el verdadero, o si es alguno o cuántos pueden ser. Hoy en día no es posible saber de donde viene y quien lo fabrica, por más que el vendedor de garantías. El vendedor, en realidad, no tiene tales garantías, ni las puede tener, debido a que el propio fabricante es desconocido para el vendedor, para el intermediario y hasta para las autoridades de la Salud. Nunca se sabe, por lo tanto, lo que se está comprando cuando se adquiere el Cytotec. Puede que sea una droga igual al antiguo Cytotec, puede ser una mezcla del Cytotec con otras cosas, puede ser también cualquier otra cosa, y hasta puede ser algún invento de alguna fábrica clandestina, técnicamente competente o no, que jura tener un remedio semejante pero que es capaz de ser producido más fácilmente. Es vendido, por lo tanto, siempre como Cytotec, por causa de la fama que el remedio original conquistó en el Brasil. Tanto por la dificultad de saber lo que se está tomando, así como por la falta total de asistencia médica en el acto, como por las hemorragias imprevisibles que son norma cuando se toma el verdadero Cytotec; así como las innumerables y ni siquiera fácilmente controlables consecuencias posteriores, cuando la paciente ya no se encuentra bajo una directa supervisión médica, que se acostumbra seguir inmediatamente después de su uso; este método de aborto, se dice en leguaje popular, una desgracia. Técnicamente es una solución altamente deficiente y extremadamente imprudente. Aunque se esté a favor del aborto y se tenga una formación médica correcta, desde el punto de vista estrictamente técnico, no lo puedo recomendar como abortivo ni en un primer o tercer mundo. Para tener una idea, aunque sea usado para provocar contracciones de parto en fetos ya muertos que no se consigan expulsar; en el caso que el medicamento sea mejor estudiado y la consulta médica establecida, nunca debe ser realizado en casa. En estos casos, en Brasil, la paciente es internada en un hospital y su curso médico es cuidadosamente monitoreado; la paciente no recibe el medicamento sin antes someterse a exámenes y frecuentemente es necesario sedarla para que ella pueda tomarlo. Un equipo médico y una sala de cirugía deben estar prontos para cualquier eventualidad imprevisible que pueda suceder. En Estados Unidos, al contrario, el uso del Cytotec para inducción del trabajo de parto es prohibido hasta para los médicos. En los Estados Unidos el aborto es legalmente permitido, por lo que no debería tener problema el aconsejar Cytotec como medio de provocar un aborto si ese fuera recomendado técnicamente de realizarse. Tanto el gobierno como la empresa misma que lo fabrica saldrían ganando con eso. El gobierno, porque la técnica de aborto con el Cytotec es más fácil y rápida de ejecutar, y el fabricante porque vendería más su producto. Pero tanto la FDA (Food and Drug Administration), el organismo que controla la venta y el uso de los remedios en los Estados Unidos, así como el propio fabricante de Cytotec, el Laboratorio Searle, no aconsejan el uso del Cytotec para provocar el trabajo de parto y/o para el aborto, porque lo consideran peligroso. En el año 2000, se evito, debido a las cuestiones técnicas, aconsejar el uso del Cytotec como método abortivo en alguno de los estados de Estados Unidos. La FDA, conjuntamente con el propio fabricante del Cytotec desaconsejaron abiertamente el uso del remedio a menos que sea usado en casos de úlceras, inclusive aunque haya supervisión médica. El comunicado realizado en conjunto de la FDA tiene fecha del año 2000, y puede leerse en la página de internet:
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Dos años más tarde, la Searle volvió a publicar las mismas advertencias, inclusive de que habían sido registradas muertes maternas por causa del uso indebido del Cytotec en los Estados Unidos. La página americana: www.birthlove.com comenta sobre este Segundo comunicado:
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En un segundo comunicado de Searle del año 2002, puede leerse nuevamente lo siguiente:
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En la página: http://www.beyondfertility.com/art112.htm hay un artículo titulado "VBAC & Cytotec: A Dangerous & Deadly Combination", esto es "VBAC & Cytotec: Una peligrosa y mortal combinación", en el cual se alerta:
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Estas situaciones son bastantes obvias, y pueden constar mismo en los países del tercer mundo. No es la visión de muchos médicos en América Latina, que afirman que el uso del Cytotec ha disminuido la muerte materna en sus países. La premisa es correcta pero la conclusión es falsa. El uso del Cytotec, aunque clandestina y sin orientación médica, disminuyó los índices de mortalidad materna en varios países de América Latina como consecuencia del aborto. Pero la disminución de la mortalidad maternal por el uso del Cytotec no cambia la naturaleza técnica del procedimiento. Si usted tiene dos métodos para jugar a la ruleta rusa y el segundo causa menos muertes que el primero, no por eso el segundo deja de ser una ruleta rusa. Quien dice lo contrario está encubriendo la verdad, y el deber de quien conoce la verdad es llamar las cosas por su propio nombre y naturaleza. Cuando las personas están a favor del aborto y ven el Cytotec como un medio para favorecerlo, se pueden aprovechar de esto y concentrarse en decir que el Cytotec disminuye las muertes maternas sin decir nada más al respecto. Pero el hecho es que el uso casero del Cytotec no es un método recomendable para abortar; en los Estados Unidos las autoridades federales de la Salud y el propio fabricante del remedio, quien tendría todo el interés de decir lo contrario, en ese país donde no hay trabas legales para el aborto, dicen que no es recomendable inclusive con asistencia médica. Yo misma puedo asegurar que en Brasil conocí tres casos de muertes maternas por haber usado el Cytotec, y he oído hablar de otros casos en otros profesionales de la salud. Algunos de los cuales conocí hace más de diez años, y fueron hechos verídicos. La verdad es que ningún aborto, ni por medio del Cytotec, ni por los métodos tradicionales, mismo suponiendo que no existan cuestiones morales en esta práctica, cosa que nadie puede negar que hay; podría ser técnicamente bien realizado, si hubiese la disponibilidad inmediata de un centro quirúrgico completamente equipado para internar a la paciente en caso de cualquier eventualidad. Un aborto, mismo realizado por un médico, no puede ser realizado en una clínica que no esté dentro de un hospital completo, a menos que exista un acuerdo entre la clínica y otro hospital para que haya asistencia inmediata a la paciente si sucediera cualquier eventualidad. De lo contrario, el aborto sería una ruleta rusa, un juego en el cual la pistola está cargada con una única bala y se apuesta que cuando el jugador dispara contra sí mismo, tendrá la suerte de que en ese tiro, la arma no dispare la única bala que tiene cargada. Existen muchos ejemplos, inclusive extremos, que aunque realizado por un profesional competente, el aborto es de hecho una ruleta rusa cuando no se dispone de todas las facilidades de un hospital que cuente con un centro quirúrgico como soporte. En el caso del Cytotec, a pesar de ser un método comparativamente más suave de los que se usaba hace quince o veinte años atrás en América Latina; el procedimiento sigue siendo bastante grave porque en la mayoría de los casos, en quien hace toda la primera parte del aborto, es una paciente ignorante en el asunto y es ella quien estará más inclinada, sino sucede una hemorragia que la asuste, a no ir a un profesional médico para que realice la segunda parte del procedimiento, pensando que puede cuidar de eso por sí misma. Si después de tomar el remedio sucediera cualquier situación que no fuera parte del curso normal de lo que ella entendió debía suceder, la paciente puede que no sepa que hacer de inmediato, y no se de cuenta que tiene que procurar un medico. Si después de tomar el remedio tuviera una hemorragia abundante, fuera de lo común, ella podría ir al médico sin pensar que necesita dar muchas explicaciones, pero si esta hemorragia no sucede, la paciente puede llegar a no comprender la necesidad de ir a un medico; también no sabría explicarle sin delatarle lo sucedido. El hecho que la muerte materna haya disminuido con el uso de este medicamento no significa que él no pueda causar los efectos que he explicado. La propia lista de Searle no es completa, porque en la mayoría de los casos, ella solo ha registrado las complicaciones que pueden suceder con el uso del Cytotec cuando ha habido asistencia médica. La septicemia puede ocurrir cuando no se cuenta con ayuda médica.
Todo esto es muy diferente al uso común que se les hace creer a las personas de este remedio. En Brasil, en los últimos años, ha habido una especie de euforia en la comunidad médica debido a la fama del Cytotec en la disminución de las muertes maternas en los casos de abortos provocados. Esta euforia está basada en datos reales, que paradójicamente ha ayudado ha cubrir los riesgos que pueden ocurrir con la automedicación con Cytotec. Esto, junto al hecho del bajo costo en que se puede conseguir legalmente esta droga, ha favorecido el que sea usado en los hospitales, llevando a muchas personas serias ha tener la tendencia de subestimar peligrosamente las consecuencias reales en la práctica de automedicarse, que posee estos casos, y negar los hechos que serían más fácilmente avalados si el ambiente en la comunidad médica brasilera fuera diferente.
En 1993, cuando este ambiente era bien diferente y no existía esta euforia, fue publicado, en la Lancet inglesa, un estudio de varios casos de abortos en Rio de Janeiro realizados por dos médicos brasileros, S. Costa y M. Vessey ("Misoprostol and Illegal Abortion in Rio de Janeiro"). Ellos consiguieron que en los 458 casos de mujeres que usaron el Cytotec sucedieron tres muertes, 2 septicemias y un rompimiento de útero. En un artículo más reciente en la literatura médica (Daisley H J: Maternal mortality following the use of Misoprostol, Med Sci Law 2000 Jan;40(1):78-82) son reportados tres casos de muertes maternas debido al uso del Cytotec; dos ocurridos en el intento de realizar un aborto ilegal por medio de la automedicación; y un tercero ocurrido después de la ruptura uterina, que ocurrió luego de ser suministrada por médicos en la inducción de un parto. La posibilidad de septicemia y de muertes por consecuencia del uso del Cytotec puede ser investigada hasta hoy en día en el Brasil. Yo misma, como mencioné encima, conocí tres casos y conozco otros profesionales que me reportaron haber conocido otros más. Todos ellos fueron consecuencia de la automedicación con Cytotec.
Tal como sucede con el uso de drogas, en el cual a las personas se les hace creer que es la mejor cosa del mundo, si lo saben usar con criterio, pero más tarde lamentan las terribles consecuencias; así también sucede con el Cytotec, a las personas se les hace creer que es la mejor cosa del mundo, si las saben usar con criterio, pero nunca se le advierte de las consecuencias que pueden sufrir. El motivo de que se escondan estos hechos es que, en ambos casos, con la droga y con el Cytotec hay una red clandestina de criminales que las distribuyen, para quienes les interesa que la verdad no llegue al público, o por lo menos que no llegue a un cierto público, de quienes quizás usted forma parte.
Existe una gran diferencia, por lo tanto, la falta de información sobre el Cytotec es mayor que en el caso del uso de drogas. Al contrario del verdadero tráfico de drogas, el Cytotec no causa dependencia de por vida; todo el daño que él puede hacer sucede relativamente en un corto plazo, y después o se soluciona, o no se puede arreglar más. No sucede como en el caso de los dependientes, que a medida que el tiempo pasa el problema se vuelve más grave, y aunque es más difícil, se necesita cada vez con más urgencia y desesperadamente. En el caso de las drogas, esto hace que exista una gran presión por parte de la sociedad para que se den más explicaciones al público, lo que no sucede con el Cytotec. A las personas se les engaña con extrema facilidad de que es algo seguro, pero la verdad es que no lo es ni lo podrá ser, porque no hay en este mundo la ciencia que está detrás en la automedicación del Cytotec, pero si el mundo del crimen. Yo jamás tomaría un avión con el cual hubiera, para decir lo mínimo, un 10% de probabilidades de terminar internado en una UTI antes de llegar a mi destino, aunque conociera nueve de las personas que logran terminar le viaje.
Espero que este texto sea de ayuda para ustedes. No estoy exagerando, conté las cosas como son. Si usted no tiene certeza de que sea así, espere algunos días, lleve este mensaje para quien realmente conoce el problema y aclare este asunto. Retrasar el aborto unos días no le impedirá hacerlo más tarde, principalmente cuando se está en el inicio del embarazo; pero hacerlo inmediatamente puede hacerla pasar, sin necesidad, por todo lo que le estoy contando en este mensaje.
Me gustaría recomendarle consultar las siguientes páginas de internet, donde puede conseguir bastante información sobre el aborto, no sólo sobre el Cytotec. Antes de tomar alguna seria decisión, es necesario que piense y medite seriamente. De cien personas que dicen querer realizarse un aborto, en un consultorio medico, 50 se hacen el aborto y 50 desisten o no lo consiguen. De las que desisten, nunca vimos alguna que se arrepintiese de haber tomado esa decisión, no importando cuán grave eran los problemas que tuvieron que enfrentar por ello. De las que no desisten, la mayoría sufre por haber tomado esta decisión por el resto de sus vidas. Algún motivo debe haber para esto, y uno de ellos es ciertamente no haber querido informarse con calma sobre todos los ángulos de lo que estaban haciendo. Es por ello, que le pido, por el bien de usted misma, no sólo en el de su bebé, no deje de analizar con atención todo el contenido de esta página. Al contrario de este mensaje que originalmente está en portugués, las páginas de internet abajo mencionadas están en castellano. Para quien sabe portugués es un idioma bastante parecido; pero para los de lengua española, siéntanse en casa:
Ayuda e Información en Linea |
Esta es otra página donde usted puede conseguir, en portugués, una información bastante clara sobre los riesgos de otras técnicas de aborto:
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Un beso a todos. Espero les haya podido ayudar. Escríbanme si quieren. Estaré feliz de recibir noticias suyas,
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